Sequía golpea a embalses, empresa sanitaria hace dura advertencia y alcaldesa de Río Hurtado alerta por “racionamiento” de agua

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La jefa comunal, Carmen Juana Olivares, explica que la limitación hídrica afecta a los Comités de Samo Alto y Pichasca desde hace dos meses, situación que se agrava con el diagnóstico de Aguas del Valle, forma que mantiene que se buscan alternativas para mantener la continuidad del suministro de agua potable en el resto de comunas de la región.

Una dura advertencia realizó la empresa sanitaria Aguas del Valle (ADV) por el bajo caudal de los embalses que están obligando a la firma a buscar alternativas para mantener la continuidad del suministro potabilizado para el resto de comunas. Ello, sumado a que la alcaldesa de Río Hurtado, Carmen Juana Olivares, confesó de la implementación de un “racionamiento” del recurso en los Comité de Samo Alto y Pichasca, situación que viene dándose desde hace dos meses.
En un nuevo reporte de ADV, actualizado al 31 de enero de 2022, la empresa sanitaria coincide con los datos que facilita la Dirección General de Aguas (DGA), con el diagnóstico de la “la grave escasez hídrica que afecta a la región de Coquimbo, con la casi nula acumulación de nieve y un déficit de 100% de agua caída”.

Los casos más extremos son en el embalse Cogotí, en Combarbalá, que registra menos del 1% de acumulación, sostiene la empresa. En Illapel, El Bato ya alcanzó su nivel mínimo de aguas, con 6,3%.
“Estamos enfrentando un escenario hídrico complejo, con una sequía que se ha extendido por más de 13 años y que se agudiza cada día. Sin embargo, continuamos trabajando para buscar alternativas en conjunto e implementar medidas que nos permitan mantener la continuidad del suministro de agua potable en toda nuestra área de operación”, sostiene el gerente Regional (s) de Aguas del Valle, Alejandro Salas, quien agrega que “la situación es delicada, y la recarga de las fuentes hídricas de este invierno son fundamentales para evitar escenarios de racionamiento en el área urbana”.
Es por eso que, a través de un convenio con la Junta de Vigilancia del Río Illapel y la Dirección de Obras Hidráulicas, la compañía está apoyando con infraestructura y motobombas especiales para extraer los cerca de 1,5 millones de m3 que aún se encuentran almacenados en El Bato, además de apoyar a los Sistemas Sanitarios Rurales que están en la ribera del río, abastecer al sector agrícola y contar con un suministro de reserva para la ciudad.
De acuerdo al catastro mensual es elaborado por la DGA, al cierre de enero de este año, existen 239 millones m3, es decir apenas el 18% de la capacidad instalada (1.325 millones de m3) en estos tranques, principalmente destinados a riego. Respecto de la cantidad de agua embalsada, en la provincia de Elqui, Puclaro cuenta con un 33,1% de su capacidad total; en Limarí, La Paloma llega sólo al 15,8%.
En relación con la nieve, la estación Vega Negra -en la cordillera de la provincia de Limarí- registra un déficit del -94,8% respecto a un año normal, con sólo 20 mm acumulados.
En este contexto, el ejecutivo de la sanitaria reforzó al llamado a la comunidad al uso moderado del consumo de agua potable, especialmente durante esta época estival, donde se proyecta que la demanda del recurso aumentará un 14% en promedio.

Río Hurtado, sería la primera en racionar
“Para nosotros el tema de la sequía es crítico. Nuestra visión es distinta a los sectores urbanos, pues estamos en función de mirar el río, ver si hay o no nubes, llovió, o cae nieve. Vivimos el proceso día a día”. Esas son las declaraciones de la alcaldesa Carmen Juana Olivares, quien esta semana acusó restricciones en el suministro de dos sectores de la comuna, lo que ha llevado a ese municipio a depender del 100% de la distribución que realicen camiones aljibes. “Pichasca que abastece a cuatro pueblos, donde hay escuelas (San Pedro y El Espinal), colegios (Pichasca) y un Centro de Salud Familiar, y en Samo Alto, donde está la municipalidad, están tremendamente afectados”, graficó.
Así se trabaja en formas de intervenir la restricción hídrica, con para estanques de emergencia o apertura de nuevos pozos, por lo menos en lugares cercanos a poblados o en los establecimientos educacionales.
Olivares sostuvo que, con la pandemia, la normativa y los protocolos Covid indican la importancia del lavado de manos frecuente para evitar contagios.
“Si bien no hay una ordenanza que hayamos decretado de no lavar autos, el llamado está al uso eficiente del recurso, incluso nosotros no estamos regando espacios públicos, porque estamos dejando el agua exclusivamente para el consumo humano”, sentencia.