Según el ente emisor, el negativo resultado se debió por la incidencia adversa de la minería, que fue compensado por el buen desempeño del sector servicios, que arrojó hasta un 13,2% de crecimiento en el consumo de hogares.
Un débil desempeño económico experimentó la región de Coquimbo, entre enero y marzo en 2022. Esa fue una de las conclusiones del Banco Central de Chile (BCCh), luego que el ente autónomo desmenuzara el Producto Interno Bruto Regional (PIBR) trimestral de cada una de las regiones del país.
La información fue entregada ayer por el organismo y arrojó que la región de Coquimbo anotó un crecimiento de solo 0,2%, ubicándose como la zona del país con menor actividad en Chile, rozando la “recesión”.
Y es que por ampliar la información estadística disponible para los usuarios, en línea con lo anunciado en el último Informe de Política Monetaria (IPoM), el organismo recogió los datos preliminares de las Cuentas Nacionales Trimestrales, como una forma de fortalecer las estadísticas regionales, permitiendo disponer con mayor oportunidad las cifras de actividad regional.
“La mayor frecuencia del PIBR se sustenta en la disponibilidad de nueva información tributaria e indicadores de corto plazo a nivel regional”, sostuvo el Banco Central.
Explicaciones
En el periodo analizado, el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció 7,2% con respecto al primer trimestre del año anterior. Por su parte, el consumo de los hogares (CHog) a nivel nacional registró un alza de 13,9% en doce meses.
En línea con la descomposición regional por macrozonas, el crecimiento del PIB fue explicado por incidencias positivas en todas las macrozonas, destacándose las regiones de Los Lagos (11,2%), Valparaíso (10,7%), y Arica y Parinacota (9,9%), además de la Metropolitana con un 9,2%. Al contrario, las áreas geográficas con peor dinamismo fueron además de Coquimbo (0,2%), el Libertador General Bernardo O’Higgins, con una caída de 1,3%, y el Maule, que llegó a un 1,8% (ver tabla).
El Central argumentó que la región de Coquimbo tuvo este resultado “por el efecto positivo de los servicios, el cual fue compensado por la incidencia negativa de la minería en la región”.
“El 13,2% de crecimiento en el consumo de hogares fue explicado tanto por el consumo de servicios como por el de bienes no durables”, indicó el BCCh.
En términos nacionales, el crecimiento de la actividad se explicó principalmente por el aporte de los servicios, destacándose los servicios personales, el transporte y los servicios empresariales. Por su parte, en el consumo de hogares destacaron por su contribución el gasto en servicios (en particular, los relativos a salud, restaurantes y hoteles y transporte) y en bienes no durables (vestuario y combustibles).
