Jefe de la billetera fiscal explicó las implicancias de los tres fondos establecidos en la nueva normativa y sostuvo que aún existen ajustes no solo para ingresar territorios que no fueron incorporados inicialmente, como también los montos establecidos.
“Royalty minero”. En media hora, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, no solo tomó la palabra sobre uno de los motivos de su visita a la región de Coquimbo, sino que también explicó los alcances de la nueva normativa y los ajustes que aún pueden producirse en una de las iniciativas que más empujó la administración del presidente Gabriel Boric.
Y es que después de casi cinco años, se dio luz verde al cuerpo legal que generará compensaciones para las regiones y varias comunas del país, especialmente aquellas dónde se generan externalidades por el desarrollo de la propia actividad productiva.
Marcel indicó que los fondos del royalty estarán ajustados a la UTM para ser estables en el tiempo, además para no sufrir a variables económicas, como la inflación.
En total, se contemplan tres fondos. El primero es el Fondo para la Productividad y el Desarrollo, que se destinará a los presupuestos de los Gobiernos Regionales, fijados por los próximos 10 años. “Se destinan a financiamiento de proyectos productivos, entendiendo planes y programas para la actividad productiva, el desarrollo regional, la investigación y tecnológica, en línea con la Estrategia Regional de Desarrollo”, dijo.
La distribución irá de acuerdo a lo que recibe cada uno del FNDR, y los recursos pueden ahorrarse y utilizarse en futuros periodos: “No es obligación gastarse los recursos en el año, y se pueden acumular al periodo siguiente”, destacó.
En segundo lugar, se encuentra Fondo para las Comunas Mineras, que establece un mecanismo para compensar las externalidades negativas en el territorio de aquellas comunas que poseen faenas sujetas a royalty (yacimientos, relaves, puertos, fundiciones, entre otras). De acuerdo al secretario de Estado, en un primer análisis, se identificó a 32 comunas del país, de las regiones de Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Coquimbo, Valparaíso y O’Higgins. “Para esto, el criterio para distribuir considera la incidencia de la actividad minera y la población de la comuna, tomando en cuenta la cantidad de los yacimientos, la cercanía de la población, la presencia de pasivos ambientales y la declaración de zona latente saturada, y todo esto se va a elaborar un informe de Cochilco”, precisó.
Respecto al Fondo para la Equidad Territorial, que está dirigido a las comunas más dependientes de Fondo Común Municipal en todo el país, va a favorecer a las 302 comunas más vulnerables.
Consideraciones
De acuerdo al jefe de la billetera fiscal, los municipios deberán informar en qué se utilicen los recursos, puesto a que se trata de aportes fiscales adicionales a los existentes, aunque serán sin trabas, es decir no hay condiciones respecto a qué se pueden utilizar, y se pueden acumular de un periodo a otro.
“Ustedes han visto los cuadros de distribución de los recursos. Eso es aún preliminar porque hay que definir la formula específica con la cual se van a entregar los recursos. Hay espacio para que algunas comunas, que cumplan con los requisitos, puedan agregarse”, sentenció