Empresa regional fue uno de los operadores que amenazó con irse a paro en julio pasado a raíz de esta propuesta, que trae la anhelada regulación del transporte público entre ambas comunas. “Esperamos que la empresa que se adjudique la licitación venga a mejorar el sistema y subir el estándar”, dice la seremi del ramo, Alejandra Maureira.
Asociación Gremial de Dueños de Microbuses La Serena-Coquimbo, Liserco; Transportes Eléctricos Chile SpA; Green Energy Transport Latin American (Spa); Transportes Fichtur Ltda.; Electromovilidad Green DAV SpA; Llanquihue SpA y RBU Regional SpA.
Estas son las razones sociales de los siete interesados en participar en el proyecto para prestar servicios de transporte público mediante una flota de 42 buses eléctricos entre La Serena y Coquimbo, en marco del Programa Especial de Fomento a la Electromovilidad en la región y una de las pocas medidas anunciadas para la zona por el presidente Gabriel Boric, en su última Cuenta Pública.
Los datos se conocieron tras la apertura de las ofertas económicas, realizada el pasado 08 de septiembre, en la División de Transporte Público Regional. En la oportunidad también se reveló el subsidio que entrega la iniciativa, que asciende a los $4.560 millones al año, esto es unos US$5,1 millones.
Dentro del listado se encuentra Liserco, operador regional que, en julio pasado, amenazó con irse a paro -junto a otros actores del sistema- justamente por esta propuesta, poco después del retorno de los estudiantes por vacaciones de invierno. Incluso, representantes de la empresa recientemente sostuvieron una reunión con la gobernadora Krist Naranjo, quien también se ha mostrado contraria a la implementación del también llamado “electrocorredor”, luego de la postergación que realizó el Ejecutivo del Tranvía entre ambas ciudades.
Transportes Eléctricos Chile SpA tiene su domicilio en la región de Valparaíso y está ligada al empresario Juan Massai. En tanto, Fichtur es una reconocida empresa de almacenamiento, comunicaciones y transportes de carga y pasajeros, con presencia en operaciones de buses interurbanos, aliada a la gigante Pullman Bus.
Por su parte, Llanquihue SpA y RBU Regional SpA han participado en otras licitaciones similares, como por ejemplo en la ocurrida en Antofagasta, la ciudad donde reside Green Energy Transport Latin American SpA, específicamente en el sector de La Chimba.
Alejandra Maureira, seremi de Transportes, sostuvo que la apertura de ofertas de la licitación de los buses eléctricos para La Serena y Coquimbo, “demuestra que existe un alto interés en el proyecto”. “Como siempre lo señalamos, este era una licitación abierta, donde, en los márgenes que se establece, cualquier operador que cumpla las condiciones, podía participar”, agregó.
“Este es un proyecto muy esperado por la ciudadanía, contar con un transporte público mayor regulado es una necesidad para miles de personas que a diario lo utilizan, por lo que esperamos que la empresa que se adjudique la licitación venga a mejorar el sistema y subir el estándar del funcionamiento del transporte público en la conurbación”, precisó.
Los buses eléctricos tendrían estándar Red, vale decir accesibilidad universal; recaudador de dinero electrónico; climatización (calefacción y aire acondicionado); puertos USB para recarga de dispositivos; Wifi; contador de pasajeros y un sistema de GPS para facilitar el monitoreo de los usuarios en cuando a la llegada de la maquinaria a un punto específico.
Se estima que la flota tendrá que realizar dos servicios, que unirán desde los sectores de El Llano y Sindempart, en Coquimbo, hasta Las Compañías, en la capital regional.
El calendario que sigue es las evaluación técnica y económica de cada oferta, el 25 de octubre del año en curso. Luego, vendrá la notificación del seleccionado, que sucederá el 10 de noviembre del 2023. La suscripción del contrato con el Ministerio de Transportes se efectuará el 01 de diciembre.
La implementación del proyecto, equivalente al 10% del mercado entre ambas comunas, viene a concretar no solo la llegada de la electromovilidad a la región de Coquimbo, sino de la ansiada regulación del sistema, vale decir que los servicios deberán respondan con mayor rigurosidad a la frecuencia de buses, tiempos de desplazamiento, horarios de atención, además que la fijación tarifaria estará sujeta a variables económicas objetivas, como el valor del dólar, los precios de la energía y la inflación, entre otras.