“A partir de mi propia historia, he querido llevar este testimonio a las escuelas para crear conciencia y a la vez dar esperanza, de que se puede salir adelante cuando te ves en esta situación”, explica Enrique Encina, que se dedica a visibilizar este problema a estudiantes.
Para algunos, la experiencia vivida en los colegios, es una de las más bonitas y gratificantes, la oportunidad de estudiar y adquirir conocimientos para unos, la o compartir momentos únicos que serán recordados hasta el día de la muerte con los amigos de la niñez para otros, o una combinación de ambas.
Momentos que se traducen en risas, chistes y bromas entre amigos, pero que lamentablemente en algunos casos, exceden lo soportable cuando ya se convierten en mofa, acoso y abusos, lo que se conoce como bullying y que sufren muchos niños, dañando su integridad psicológica y haciendo imposible una sana convivencia.
Situación patente en muchos establecimientos educacionales del país, en algunos más que otros, pero es algo que al menos hoy no es ignorado y se intenta enfrentar y trabajar para que se reduzca.
Una de las personas que ha decidido poner sus esfuerzos y motivación en ayudar a niños y colegios a hacer frente al problema del bullying, es Enrique Encina, profesor de Educación Física, y que hoy se dedica a realizar intervenciones en los colegios para prevenir el acoso escolar, que denomina como “Bullying, un mal compañero”.
Para el docente, hacer esta intervención no es solo un trabajo, pues el mismo sufrió de acoso escolar en el segundo ciclo de la educación básica (5to a 8vo básico), debido a su baja estatura, “mido 1,59 metros”, señala.
De esta forma expresa que “a partir de mi propia historia de bullying sufrido en el colegio, he querido llevar este testimonio a las escuelas para crear conciencia y a la vez dar esperanza, de que se puede salir adelante cuando te ves dentro de un problema como ese”.
También detalla que dicha producción está diseñada para niños del primer ciclo de enseñanza básica (1ro a 4to básico), puesto que “quiero que los niños creen conciencia desde un comienzo, cosa que cuando lleguen a curso más avanzados, tengan desarrollados de mejor manera los valores como la empatía, el respeto, el compañerismo y la solidaridad”.
La historia de Nanito
Encina explica que inicialmente su intervención consiste en la exposición de un video de cinco minutos, el cual “relata un cuento con ilustraciones propias del mismo, que cuenta una historia de bullying, en la cual hay un personaje que se llama Nanito”, que es quien sufre los acosos.
Es entonces cuando se termina el video, que se da un giro a la historia, pues en ese momento, Enrique aparece en el mismo revelando a su audiencia que Nanito es él mismo, y que la historia que se cuenta es su experiencia personal. Así logra crear sorpresa en los niños a la vez de que puedan ponerse en su lugar.
Pero su labor no termina allí, ya que continúa con juegos de colaboración en el patio del colegio “en los cuales no hay ganadores ni perdedores” detalla, para luego “entrar a la sala, donde los niños responden una encuesta de la actividad y firman un compromiso anti bullying, que es un poster que queda pegado en la sala de clases, y al final entrego diplomas para cada uno y chapitas, dura dos horas pedagógica”.
Igualmente, el profesor espera poder seguir haciendo esta labor en más instituciones educacionales y llama a “los colegios y centros de padres a que puedan conocer mi trabajo, así podrán darse cuenta del real impacto y beneficios que puede tener mi intervención, espero que puedan contactarse conmigo y así acercarme y mostrarles en detalle lo que hago”.
