Se espera que el Gobierno, a través de la Dirección General de Concesiones, del Ministerio de Obras Públicas, concrete el llamado a licitación pública para construir y operar el proyecto Planta Desaladora para la Región de Coqjuimbo”, valorizado en US$260 millones que se alojará en el sector El Panul de Coquimbo.
Durante el último trimestre del 2024 se prevé que el Gobierno, a través de la Dirección General de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP), concrete el anuncio presidencial y llame a licitación pública el proyecto “Planta Desaladora para la Región de Coquimbo”, iniciativa que como anunció Semanario Tiempo necesitará de casi US$300 millones para poder materializarse.
Y la semana pasada, Aguas del Valle y la Secretaría Regional de la cartera encabezaron una instancia de participación ciudadana temprana, donde la comunidad no solo se interiorizó en aspectos técnicos de la medida, sino que se profundizó en intención de la empresa sanitaria de participar en el proceso, donde el MOP será el responsable de ingresar este proyecto al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), para luego licitar su construcción y operación.
En ese escenario, el delegado Presidencial, Galo Luna, entregó reacciones, considerando que el proyecto es considerado por autoridades -transversalmente-, gremios y especialistas han oficializado su conformidad en la materia, especialmente por la grave sequía que afecta a la región de Coquimbo.
Para Luna, “nos parece muy relevante que se pueda compartir a la comunidad la dimensión de este proyecto, que es tan importante para la región porque, pese a las precipitaciones que tuvimos, la crisis hídrica persiste, estas lluvias fueron solo un alivio”, indicó.
“Es por ello, que como gobierno hemos avanzado en distintas medidas que permitan contar con soluciones de corto, mediano y largo plazo, y entre ellas está la desaladora, que permite asegurar el consumo humano de agua, y también apoyar la actividad agrícola, que genera miles de empleos y la seguridad alimentaria de gran parte del país”, precisó.
El proyecto
La planta desaladora de Coquimbo se ubicará en el sector de El Panul de Coquimbo y utilizará la tecnología de osmosis inversa para tratar el agua de mar, con una capacidad de 1.200 litros por segundo.
Se estima una inversión de US$ 260 millones y su construcción generará más de mil puestos de trabajo, beneficiando a más de 460.000 habitantes de la conurbación La Serena-Coquimbo. Asimismo, el complejo tendrá una vida útil de 54 años.
De acuerdo a las estimaciones de Aguas del Valle, el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la planta se presentará durante el segundo semestre de este año. “Este es un proyecto muy importante para las comunidades y la región porque viene a reforzar y robustecer la capacidad de la región para producir agua y distinta a lo que hasta ahora se ha realizado en su historia”, indicó el gerente de la compañía, Andrés Nazer.
En tanto, el recurso se almacenará en un estanque de distribución de agua potable de 8.000 m3, preliminarmente ubicado a cerca de 21 km de la planta.