Empresa cuprífera indicó a Semanario Tiempo que la acción judicial (denuncia de obra nueva) “no tiene impacto alguno en las actuales operaciones la de compañía, entre ellas el tranque, por cuanto se refieren a obras futuras que actualmente no existen, ni están en construcción”. Habrá comparendo el próximo 17 de enero.
“A lo establecido en el artículo 565 del Código de Procedimiento Civil, se decreta provisoriamente la suspensión de la obra denunciada, debiendo tomarse razón del estado y circunstancias de la obra a través de Receptor Judicial y debiendo apercibir al que la esté ejecutando con la demolición o destrucción a su costa, de lo que en adelante se haga”.
Esa fue parte de la resolución que determinó el magistrado Luis Pacheco del Juzgado de Letras y Garantía de Los Vilos al acoger a tramitación una nueva denuncia interpuesta por 11 habitantes de la localidad de Caimanes contra el tranque de relaves El Mauro, de Minera Los Pelambres.
Pacheco ordenó para los efectos citar a una audiencia entre las partes, fijada para el próximo 17 de enero del año en curso. Ello para analizar los antecedentes de la demanda -patrocinados por el abogado Erwin Mendoza- que buscan la “suspensión inmediata de las obras que se pretenden realizar en el tranque El Mauro, considerando los nuevos proyectos de ampliación del tranque El Mauro, como lo son el proyecto denominado PAO y EVO”.
Los antecedentes de la demanda, indicó el abogado Mendoza, son que Minera Los Pelambres desarrolló el Tranque Mauro a 10 kilómetros de la localidad de Caimanes, iniciativa con Resolución de Calificación Ambiental favorable. En ese sentido, primero, apeló a la resolución de la Corte Suprema, que ordenó en octubre del 2014 “restituir el curso natural de las aguas, tanto superficiales como subterráneas, del Estero Pupío”. Para ese efecto, el máximo tribunal solicitó a la empresa establecer “un plan de ejecución de las obras necesarias para llevar a cabo este cometido, las que podrán ejecutarse por medio de la demolición o remoción, total o parcial, de la obra singularizada”.
Pero la Corte Suprema asignó al mismo Juzgado de Los Vilos revisar dicho plan, que fue considerado insuficiente por el entonces juez Jairo Martínez, ratificando la resolución mandatada por el máximo tribunal del país. La empresa reclamó a la Corte de Apelaciones de La Serena, donde finalmente las partes presentaron un avenimiento, poniendo fin en forma definitiva a la causa.
Nuevos “antecedentes”
Según el escrito del abogado Mendoza, el tranque El Mauro “se ejecutó en la zona más angosta y sísmica del país, y en caso de que se produjera un temblor, se multiplicaría el grado de intensidad de 5 a 10 veces, ya que al entrar la onda sísmica en una zona de relleno saturado de agua, el suelo se licua y el muro se derrumba, cayendo sobre las localidades ubicadas cuesta abajo, entre ellas, el pueblo de Caimanes”. Además, mencionó que su construcción y operación generó un impacto social de gran importancia a nivel local, pues “se destruyeron 140 sitios arqueológicos y se contamina el agua potable para la población que ya carece del líquido elemento para regadío”.
Otro de los argumentos que entregó la acción legal es “los impactos medioambientales asociados a las obras planteadas en el área de Punta Chungo en este proyecto se incrementan entre 150% a 244%, por ende, las modificaciones presentadas no pueden hacerse extensivos a la RCA N°16/2018, quedando esta, obsoleta”. Asimismo, la denuncia señaló que “el proyecto así presentado en la zona Punta Chungo, no considera los aspectos relevantes vinculados al medio ambiente acuático, asociados al incremento de las emisiones de potenciales contaminantes ambienta-les, y sólo se restringe al cumplimiento de DS 90, minimizando de esta manera la gran relevancia del impacto por incremento en la salinidad del medio acuático, por aumento de las descargas, las cuales tienen un impacto en las variaciones significativas de la conductividad”.
Lo cierto es que actualmente la empresa ejecuta el proyecto de Infraestructura Complementaria (INCO), que pretende construir una planta desalinizadora para abastecer del vital elemento las operaciones de la minera. El proyecto PAO (Proyecto de Adaptación Operacional), en tanto, se encuentra en evaluación, sin ser aprobado definitivamente por el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA). Por su parte, EVO ni siquiera ha sido presentado al sistema.
De acuerdo a lo que informó a Semanario Tiempo la empresa por esta nueva demanda, “la acción judicial presentada por un grupo de personas de la localidad de Caimanes, informamos que ésta no tiene impacto alguno en las actuales operaciones la de compañía, entre ellas el tranque El Mauro, por cuanto se refieren a obras futuras que actualmente no existen, ni están en construcción”.