El 5 de abril, Minera Los Pelambres comunicó que unos 3.130 trabajadores propios y contratistas dejaron de ingresar a las faenas, lo que incluyó al personal que se desempeñaba en la construcción del proyecto Infraestructura Complementaria (INCO). Esto equivale al 50% de los trabajadores de operación y al 75% de quienes estaban construyendo INCO.
Antofagasta Minerals (AMSA), matriz de las empresas cupríferas Los Pelambres, Centinela, Antucoya y Zaldivar, informó el miércoles 22 de julio que durante el tercer trimestre de este año espera reiniciar las obras de construcción de los proyectos de inversión del grupo que fueron detenidas por la crisis sanitaria del coronavirus
El presidente Ejecutivo de AMSA, Iván Arriagada, sostuvo que “esperamos poder reiniciarlos tan pronto existan las condiciones sanitarias para poder hacerlo, ya que la seguridad de los trabajadores y de las comunidades vecinas es lo más relevante”.
Las cuatro faenas del Grupo Minero operan desde marzo con aproximadamente dos tercios de su fuerza laboral. “A medida que hemos adquirido experiencia trabajando de manera segura en este nuevo contexto, hemos logrado expandir nuestra actividad en áreas que inicialmente restringimos, como en el desarrollo y mantenimiento de mina. Creemos que podemos seguir operando en los niveles actuales hasta el final del año, suponiendo que no se impongan más restricciones relacionadas con el COVID-19”, destacó Arriagada.
El 5 de abril, Minera Los Pelambres comunicó que unos 3.130 trabajadores propios y contratistas dejaron de ingresar a las faenas, lo que incluyó al personal que se desempeñaba en la construcción del proyecto Infraestructura Complementaria (INCO). Esto equivale al 50% de los trabajadores de operación y al 75% de quienes estaban construyendo INCO.
“Lo más importante para nosotros es el cuidado de la seguridad y salud de las personas, por eso estamos tomando todas las medidas posibles para disminuir los riesgos de contagio”, indicó en su oportunidad Alejandra Medina, gerente de Asuntos Públicos de la compañía.
En tanto, sobre la situación del Proyecto INCO, agregó que “a pesar de que implica posiblemente un retraso en su ejecución, esta disminución temporal de la actividad en el proyecto INCO nos ayuda a asegurar que los trabajadores tendrán espacio suficiente en los buses y casinos para estar, al menos, a un metro de distancia”.
Estas medidas preventivas, se sumaron a otras acciones que está impulsando la compañía desde febrero pasado, como el control de salud en el origen de los trabajadores, control de temperatura en los accesos a faena y en el KM0 antes del ingreso al Valle del Choapa, el refuerzo a las labores de higiene y desinfección en buses, la prohibición de asistir a trabajar con síntomas de resfrío o gripe, controles preventivos de salud, la promoción del teletrabajo en todos los casos que sea posible y el cierre de las oficinas ubicadas en los centros urbanos. Asimismo, todas las personas que forman parte del grupo de riesgo, como embarazadas y adultos mayores, deben permanecer en sus hogares y se suspendieron las visitas de proveedores, asesores y consultores.
Antofagasta Mineral agregó que desde el comienzo de la pandemia, ha coordinado sus acciones con las autoridades locales y nacionales, según las directrices dadas por la Organización Mundial de la Salud, para introducir medidas que buscan reducir los riesgos de contagio de sus trabajadores y de las comunidades locales. Entre otras acciones, están la reducción de trabajadores en las operaciones mineras, privilegiar el teletrabajo en los casos en los que es posible, la permanencia en sus hogares de todos quienes pertenecen a los grupos de riesgo, autoevaluaciones de salud antes de acceder a faena, el uso de vuelos chárter y buses exclusivos para el traslado de los trabajadores desde/hacia las operaciones.