Tanto la ULS como la UCN cerraron, «pues como laboratorio deBiología de la Universidad de La Serena quedamos calificados como producción baja, con 80 muestras diarias, que es nuestra capacidad máxima», dijo el doctor Cristian Ibáñez, encargado del laboratorio de muestras COVID de la casa de estudios.
La región de Coquimbo pasó de no tener ningún laboratorio durante el año pasado, a seis en cuestión de meses para enfrentar la pandemia que llegaba a pasos agigantados. Sin embargo, hoy son dos los laboratorios universitarios menos, después de un cierre programado y a la espera de retomar sus funciones si es que fuese necesario en caso de una segunda o tercera ola de coronavirus.
Los laboratorios de la red pública de salud son Hospital de Illapel, CEAZA-Hospital de La Serena y Hospital de Coquimbo, «los que se encuentran trabajando con normalidad y procesando en promedio 610 muestras diarias», señaló el director del Servicio de Salud Coquimbo, Edgardo González. Un cuarto laboratorio de la red, ubicado en el Hospital de Ovalle, presentó una falla en el termociclador debido al desgaste por la alta demanda de exámenes, «pero a la espera que se subsane pronto, aunque es importante recalcar que hasta la fecha esto no ha generado un retraso en la entrega de resultados», agregó.
En cuanto a los laboratorios universitarios de la ULS (Departamento de Biología) y UCN (Laboratorio de Fisiología y Genética Marina), precisó González que «desde el 1 de enero la vía de financiamiento se traspasó desde el ministerio de Ciencias al MINSAL, con un convenio de prestación de servicio o colaboración entre los recintos y Servicios de Salud. Estos convenios están en proceso degeneración desde el Servicio, ya que consideramos importante mantener una amplia oferta en la región y ambos suman 150 muestras de procesamiento a la red, en promedio».
Para el doctor Cristian Ibáñez, encargado del laboratorio de muestras COVID de la Universidad de La Serena, esto se debió a «un cierre programado» y que sabían «iba a suceder». El profesional manifestó que «todos los laboratorios universitarios sabíamos que iba a ocurrir en algún momento, pues el financiamiento para el funcionamiento de los laboratorios en Chile dependía del ministerio de Ciencias…».Pese a que se les había informado con anticipación que el apoyo duraba hasta fin de año, el ministerio de Ciencias, cuenta el profesional, «estaba en conversaciones con el Minsal para el traspaso -29 de diciembre- delos laboratorios universitarios en aquellas regiones donde estos fueran prioritarios para seguir funcionando». Entonces ese mismo día llegó hasta la ULS un documento del Minsal catalogando a los distintos laboratorios universitarios de acuerdo a su capacidad de diagnóstico: Laboratorios de alta capacidad (sobre 550muestras al día), media (de 251 a 500)y baja (hasta 250 muestras)«Y nosotros como laboratorio de Biología de la ULS quedamos calificados como producción baja, con 80muestras diarias, que es nuestra capacidad máxima, al igual que el laboratorio Figema de la UCN, con 108»,avisó Ibáñez, también director de post-grado y post-títulos de la casa de estudios.
Como laboratorio fueron catalogados dentro de este cuadro, y en base a eso el Minsal estableció algunas directrices de cómo deberían funcionar los laboratorios universitarios en caso de que los Servicios de Salud así lo estimen conveniente.
«Entonces la determinación de continuar o no depende del Servicio de Salud Coquimbo, que podría decidir que ante un aumento en la necesidad de diagnosticar muestras, requiere que los laboratorios vuelvan a la actividad y ahí tendríamos que establecer un convenio donde se establecen directrices de cómo ocurrirá aquello, a diferencia de la vez anterior, donde el ministerio de Ciencias nos entregaba un recurso, al que obviamente teníamos que postular…»
Explica el doctor Cristian Ibáñez que para volver a funcionar «noes llegar y decir mañana les enviamos muestras y reactivamos», sino que primero tiene que estar firmado el convenio por el director del Servicio de Salud y el rector delas ULS, «y una vez que ese convenio esté aprobado por las contralorías internas de ambas instituciones, recién ahí se activa el mecanismo. Pero sí, es importante señalar que el laboratorio de la ULS está intacto, no le hemos quitado nada, así que si tuviéramos que analizar muestras de manera urgente, por ejemplo mañana, podríamos hacerlo, porque el personal está disponible»