Un grupo de consejeros regionales visitaron el Complejo Ambiental San Juan, recinto que alberga una planta de tratamientos, un centro educacional, un relleno sanitario, incluso prevé la construcción de un parque. Recibe los residuos procedentes de los nueve territorios administrativos más poblados de esa provincia, equivalente a unos 250 a 300 camiones diarios con basura.
Inversiones El Panul Limitada, dueños del relleno sanitario del mismo nombre, alojado a tres kilómetros del centro de Coquimbo, logró que la autoridad ambiental visara –a través de una Consulta de Pertinencia- las obras de ampliación para funcionar al 2030. Para ello, la empresa deberá invertir US$2 millones para construir diversas obras y extender la vida útil del recinto, que recibe los residuos de las comunas La Serena, Andacollo, Coquimbo y La Higuera, equivalente a casi el 60% de lo que genera la región de Coquimbo.
Y es que desde hace años se ha buscado -infructuosamente- una alternativa moderna al relleno sanitario El Panul, que gobierno tras gobierno, independiente del sello político, ha fracasado en ese intento. Con esa premisa, un grupo de integrantes del Consejo Regional de Coquimbo conocieron el Complejo Ambiental San Juan, dependiente de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno Provincial.
Se trata del saneamiento más grande de ese territorio, con 150 personas trabajando diariamente, garantizando el servicio de tratamiento de residuos las 24 horas; proporcionando valor a los residuos generados, tanto orgánicos como inorgánicos, para transformar estos últimos en materiales reutilizables para su posterior reciclaje, incluso comercializando algunos productos.
El Complejo Ambiental San Juan está compuesto por el Parque de Tecnologías Ambientales (PTA), el Centro de Educación Ambiental Anchipurac y un relleno sanitario, incluso se prevé la construcción de un parque. Miguel Alesi, director del PTA comentó a Semanario Tiempo que la planta procesa entre 250 a 300 camiones de residuos diarios, aproximadamente unas 700 toneladas.
Allí se procesan e industrializan materiales recuperados en las plantas de tratamiento de residuos sólidos urbanos, orgánicos e inorgánicos, metales ferrosos y no ferrosos, plásticos, cartones, vidrios y residuos especiales (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos, cauchos y neumáticos), provenientes de los nueve departamentos más poblados de la provincia (San Juan Capital, Rivadavia, Rawson, Santa Lucía, Chimbas, Pocito, Ullum, Zonda y Albardón), que representan el 85% de los residuos generados en toda la provincia.
Francisco Guevara, secretario del Medio Ambiente de la provincia de San Juan, indicó que existen tres pilares fundamentales para trabajar la economía circular, la sustentabilidad y sostenibilidad. Primero, se debe eliminar los vertederos, y organizar e invertir en infraestructura, plantas de tratamiento, con cintas de separación, personal preparado y equipado.
Luego, establecer alianzas con los municipios, ya que éstos son los encargados de la recolección de la basura domiciliaria. Finalmente, educar en los hogares, con objeto de crear una cultura organizacional en el núcleo familiar sobre la relevancia de tratar los residuos, en alianza con los establecimientos educacionales.
Darwin Ibacache, consejero regional, sostuvo que en San Juan existe una cadena que se viene desarrollando desde hace 10 años -parte del complejo se inauguró el 2011- que se ha ido fortaleciendo e incrementando, en un horizonte de largo plazo. “Hoy como región no tenemos nada parecido a esto, entonces tenemos que trabajar en función de poder implementar esto, por el bien de las generaciones futuras y el medio ambiente”, agregó.
Juan Barraza, consejero regional del Choapa, coincidió que “esta experiencia es importantísima llevarla a la región de Coquimbo, porque necesitamos una planta de este tipo de almacenamiento, además porque vimos como trabajan los antiguos recicladores”.