Serán 36 buses eléctricos con estándar Red accesibilidad universal; recaudador de dinero electrónico; climatización; puertos USB; Wifi; contador de pasajeros y sistema de GPS que irán desde el Llano o Sindempart al sector de Las Compañías, medida que abre la llave para el ingreso de nuevos operadores al mercado, luego que se adjudiquen las bases de licitación que hoy están en Contraloría.
El ministro de Transportes (S), José Luis Domínguez, presentó, hace unos días, los dos nuevos servicios que se implementarán en un electrocorredor entre La Serena y Coquimbo, iniciativa que será ejecutada a más tardar el primer semestre en 2023 y que pone nerviosos a las tradicionales empresas de microbuses en ambas ciudades.
Esto, no solo porque podrían ingresar nuevas empresas al sistema de transporte mayor que es operado a través de las líneas Liserco, Lisanco y Lincosur, sino por el costo que debería asumir en la compra en cada uno de los 36 buses eléctricos, la construcción de un terminal eléctrico para recarga de los mismos, entre otras consideraciones incluidas en las bases de licitación presentadas ante la Contraloría General de la República y que actualmente están siendo revisadas por la entidad.
Según Domínguez, el ente contralor puede tardar dos meses en analizar las bases de licitación y durante el mes de junio o julio, la cartera podría estar en condiciones de estar adjudicando. Agrega que, entre encargar, ensamblar los buses eléctricos e importarlos, a fines del 2022 o el primer semestre del 2023, el electrocorredor sería realidad.
Y es que son dos servicios. Uno que va desde El Llano por la avenida Balmaceda, hasta Las Compañías Baja. El otro se iniciará en Sindempart, también recorre el eje Balmaceda y llegará a Las Compañías Alta. “Estos son 26 kilómetros en un caso y 22 kilómetros en el otro, respectivamente”, estima la autoridad.
Reacciones
De entrada, Jorge Briones, ex dirigente de Lincosur y dueño de maquinarías, opina que “en momentos, como está la presentación de las bases de licitación, nosotros podríamos quedar afuera de las postulaciones”. En ese sentido, apunta que la planificación del proceso pudo darse anteriormente con los implicados en el asunto: “el Gobierno tenía esto cocinado hace como dos años, querían meter buses acá, porque en un principio habían hablado de 8, luego 10 y ahora aparecen con 36”.
Sin embargo, espera profundizar aún más en la licitación, puesto que la subvención fiscal en la adquisición de los buses eléctricos, podría alcanzar el 50% de las maquinarias.
Briones considera que una de las mayores afectaciones sería la variante 6 de Lincosur, que abarca desde el sector Nueva Vida en Pan de Azucar, pasando por el sector de Tierras Blancas, el eje Balmaceda, el caso antiguo de La Serena y Las Compañías. “Esa es la variante más fuerte que tenemos. Y el recorrido no escogió la Ruta 5, sino Balmaceda”, dice respecto al recorrido que posee una frecuencia de 6 minutos en casa punto, con 45 maquinas destinadas a ese propósito, es decir el 14,5% de la flota total inscrita de la empresa.
Recorrer este trayecto tarda unas 3 horas.
Otras alteraciones son a las variantes locales que descienden desde distintos puntos del populoso sector de Las compañías al centro de La Serena, los que confluyen en calle Nicaragua, se desplazan por el Puente El Libertador y llevan al casco antiguo. “Nos afectan en todo sentido, tanto en recorridos locales, como entre comunas. Nos va a afectar a todas las variantes que vienen por Las Compañías”, reitera.
Consultado a Liserco, empresa que presta servicios desde El Llano, Sindempart y otros puntos de la ciudadpuerto a la capital regional, evitaron referirse al tema en dos oportunidades a este medio. El presidente regional y nacional de la Federación de Transporte Mayor de pasajeros y representante de esa línea, Justo Álvarez, declinó entregar su versión.
Lo mismo ocurrió, al cierre de esta edición, desde Lisanco, que al igual que Liserco, optaron por guardar silencio.
Buses eléctricos
Los servicios eléctricos se están desarrollando a lo largo de todo el país con licitaciones en Arica, Antofagasta, Copiapó, Valparaíso, Rancagua, Talca, Temuco, Gran Concepción y Puerto Montt. “Queremos que la electromovilidad llegue a todo Chile”, sostiene el Ministro (S) Domínguez, quien precisa que los buses tendrán estándar Red, vale decir con accesibilidad universal para que las personas con movilidad reducida; recaudador de dinero electrónico; climatización (calefacción y aire acondicionado); puertos USB para recarga de dispositivos; Wifi; contador de pasajeros y un sistema de GPS para facilitar el monitoreo de los usuarios en cuando a la llegada del bus a un punto específico.
Los pasajes se ajustarán a los $600 en el recorrido entre ambas comunas, y a $500 por el viaje local. Cada bus medirá entre 8 y 10,9 metros de largo, con capacidad mínima de 40 plazas y 21 asientos.
Se estima que incluso pueda existir la elaboración de un convenio entre el ministerio de Transportes y Bienes Nacionales similar a lo que ocurrió en la ciudad de Copiapó para conseguir un terreno que sirva para la construcción de un terminal eléctrico para recargar los buses, aunque éste deberá implementarse y administrarse con el privado que se adjudique la licitación.
Dicho centro de carga debe disponer de una potencia mínima requerida de 1.35 MW, un sistema de gestión de baterías y 9 cargadores.