Se estima que entre octubre y la primera semana de abril, arriben alrededor de 14.000 pasajeros y 9.000 tripulantes a la zona, quienes visitarán los principales destinos de la ciudad-puerto, además de las comunas de La Serena, Vicuña, incluso Ovalle. Estadía no supera las ocho horas.
Con 1.816 pasajeros, provenientes principalmente de Estados Unidos, Canadá, Australia y Alemania, el crucero Oosterdam, recaló el fin de semana pasado al puerto de Coquimbo. La nave es una de las 17 embarcaciones que recalará durante la temporada 2024-2025, donde se prevé 14.000 turistas y 9.000 tripulantes.
Según la directora Regional de Sernatur en Coquimbo, Angélica Funes, la coordinación de esta temporada viene preparándose hace meses, “con reuniones de los actores que trabajan en torno a la recepción de los pasajeros, como SAG, Aduana, PDI, entre otros, y también con los prestadores de los servicios turísticos que trasladarán a los cruceristas a distintos puntos de interés en ciudad-puerto, La Serena, pero además Vicuña (Valle de Elqui), incluso Ovalle”.
Pero, ¿Qué hacen los cruceristas en su estadía por la región de Coquimbo? El 30% de los pasajeros de estas naves de lujo consumen productos turísticos elaborados por micro y medianos empresarios, principalmente vinos, pisco y artesanías en base a lapislázuli. Incluso, parte de la tripulación que trabaja en los cruceros también genera gasto. El consumo de los pasajeros se traduce en una generación de divisas generan divisas cada 60 minutos, ya que son turistas que no están más de cinco a ocho horas en el destino.
La llegada de un crucero no solo es un impulso a un área específica de la actividad turística, sino que activa a diversos servicios públicos, además de toda una la cadena de proveedores de servicios que acompañan a sus pasajeros, puesto que cada uno destina hasta US$157 en el lugar de detención.
Ello, en tours diarios a distintos puntos de Coquimbo y La Serena. Entre ellos, el Mirador de La Herradura, el Cementerio Inglés, el Faro Monumental, el casco histórico de la capital regional -La Recova, Plaza de Armas, la Catedral y el Museo Arqueológico-. Asimismo, los servicios consideran la ciudad de Vicuña, como el Centro Turístico Capel, incluso el Valle del Encanto, este último emplazado a 20 kilómetros al poniente de la ciudad de Ovalle.
La Rocca Beach, nuevo atractivo
Una vez que desembarcan, los pasajeros de cruceros realizan programas de viajes que tienen contratados con anterioridad, con tour operadores locales. La empresa Ingservtur, representada por su gerenta y propietaria Silvia Bustos, sostiene que ¨es muy importante aliarse con proveedores responsable”. Ella lo sabe, porque es uno de los principales privados que trasladan a los cruceristas en su paso por la región de Coquimbo.
Uno de los puntos que visitan es la Rocca Beach. Cesar Donoso, socio del local y miembro proyecto Red Asociativa Beach Garden de Corfo, quien indica que “somos consistentes que debemos estar a la altura”. “Servimos productos gastronómicos locales, acompañados con artesanos, vinos regionales y presentación de bailes típicos. Estamos seguros que con Ingservtur seguiremos trabajando juntos¨, añade.
Con el apoyo de la Municipalidad de La Serena, se exhiben videos subtitulados con las bondades de la capital regional. También se preparó la participación de tres artesanos para mostrar sus productos y se gestionó la colaboración especial de Viña Dalbosco de la comuna de Punitaqui. Todas estas experiencias fueron apreciadas por los turistas como un elemento que aporta a la visita.
Al respecto, el director Regional de Corfo, Andrés Zurita, menciona que ¨la red Beach Garden ha sido un ejemplo de asociatividad, inversión, creación de reuniones comerciales, además de concreción de negocios que aportan no solo a la relacionar empresas con identidad regional, sino que se conforman en un imperdible turístico, gracias a la recepción de turistas extranjeros que provienen de estos cruceros que llegan al Puerto de Coquimbo.