La Seremi de salud, Paola Salas, y la presidenta regional del Compin, Loreto Santiagos, advierten las mejoras del sistema que puso a la región de Coquimbo dentro de un plan piloto para detectar la entrega anómala de licencias médicas y de los facultativos que exhiben un comportamiento fraudulento en la entrega de este derecho social.
En febrero de este año, se rediseño y modernizó el Plan de Fiscalización de Grandes Emisores de Licencias Médicas, el cual se aplicó como piloto en la región Metropolitana y extendió sus mejoras a tres regiones del país, entre ellas Coquimbo. La estrategia -ya implementada en todo Chile- tiene por objetivo abordar a los médicos que están exhibiendo un comportamiento fraudulento o sospechoso en la entrega de permisos legales.
Paola Salas, seremi de Salud en Coquimbo, explicó que a nivel nacional se han fiscalizado a 406 profesionales, de los cuales 342 efectivamente han sido suspendidos y sancionados por incumplimientos. “El impacto es grande porque un médico normal que hace el ejercicio de su profesión normal emite 200 licencias médicas al año. El procedimiento es simple porque les solicitamos verificadores de una muestra de esas licencias, el número de la ficha clínica del paciente, la agenda médica, el bono y con eso tienen que demostrar que han realizado la atención médica”, advierte.
Agregó que en la región de Coquimbo existen 11 médicos fiscalizados, en los cuales “seis estarían no cumpliendo la normativa y no han podido demostrar el fundamento médico”.
Loreto Santiagos, presidenta regional de la Comisión de Medicina Preventiva e Invalidez (Compin) precisó que el primer corte de revisión de revisión finalizó a fines de septiembre, luego de un cruce de información con datos institucionales y el estudio de las estadísticas facilitadas por los propios profesionales. La segunda etapa de revisión partirá en los últimos días de este mes.
“En el fondo, nosotros vamos verificando, por ejemplo, a nivel regional, que tenemos prestadores que emiten hasta 2 mil licencias médicas en un año”, destacó. En ese sentido, Santiagos indicó que el Compin local habilitó una nueva unidad que podrá fiscalizar entre 15 a 20 médicos en un mes, dado los buenos resultados de la política pública a nivel nacional.
“Este plan piloto se asocia a la ley 20.585, que es la norma que regula las licencias médicas focalizadas a los profesionales médicos. Nos hay un cambio en la ley, sino que el Compin implementa una plataforma digital que es más fácil para los prestadores médicos entregar la información”, añadió.
En caso de identificar un fraude, el Compin inicia un proceso donde el médico puede realizar sus descargos ante esa institución o mediante un recurso de reposición a la Superintendencia de Seguridad Social. Y los casos más complejos e irregulares, se facilitan los antecedentes al Ministerio Público para que las policías puedan investigar. Según la norma, la sanción inicial es multa y la suspensión de la facultad de emitir la licencia médica por 15 días.
Salas enfatizó que el mejoramiento del sistema ha permitido no solamente fortalecer el rol Compin, en el sentido de aliviar el trato al usuario para acoger sus reclamos y sugerencias, a través de la reducción del 16% en los tiempos de espera en la tramitación de la licencia médica.